Reflexión
"Los ríos no beben su propia agua; los árboles no comen sus propios frutos.
El sol no brilla para si mismo; y las flores no esparcen su fragancia para si mismas.
Vivir para los otros es una regla de la naturaleza. (...)
La vida es buena cuando tu estás feliz; pero la vida es mucho mejor cuando los otros son felices por causa tuya"!!!
Un buen ejemplo a seguir, en estos momentos tormentosos que estamos viviendo. Una joven conducía junto con su padre y se toparon con una tormenta.
La joven le preguntó a su padre: ¿Qué debo hacer? Su Padre le dijo: "Sigue conduciendo".
Los carros empezaron a orillarse, la tormenta estaba empeorando. Qué debo hacer papá? -"Sigue conduciendo", respondió su Padre.
Más adelante, un trailer también se estaba orillando. Ella le dijo: "Papá, debo detenerme?
Es terrible y todo el mundo se está deteniendo!" Su Padre le dijo: "¡No, sigue conduciendo!"
Ahora la tormenta era más fuerte, pero ella obedeció a su papá, y pronto pudo ver un claro más adelante. Después de un par de kilómetros volvió a estar en una zona tranquila, calmada y con el sol. Su padre le dijo: "Ahora puedes parar y salir."
Ella dijo: "¿Pero por qué ahora?" Él le dijo: "Cuando salgas, mira atrás, todas las personas que se rindieron todavía están en la tormenta, tú no te rendiste y tu tormenta ha quedado atrás. Si estás pasando por "tiempos difíciles".
Recuerda aunque todos los demás, incluso los más fuertes, se detengan o se den por vencidos, tu sigue adelante, porque pronto tu tormenta terminará y el Sol brillará y resplandecera sobre ti otra vez... Isaías 60:1-5
¡Nunca te rindas! Tu Padre está a tu lado